Intégrate al Zero Waste
- Julia García
- 30 sept 2020
- 5 Min. de lectura

Hace unos días terminé de leer uno de los mejores libros que he leído y quería compartir algunas cosas con ustedes que considero muy relevantes al aprender a vivir un estilo de vida más sustentable. Me quiero adelantar y decirles que no soy ninguna experta y cada día sigo aprendiendo más cosas. Fue por lo que cree este espacio para poder compartir contigo mis aprendizajes y ahorrarte mucho tiempo y errores que puedas tener.
Es un hecho que vivir de manera más sustentable puede ser un giro muy radical en nuestro ritmo de vida y es, a su vez, un ejercicio buenísimo para generar conciencia y reconocer el impacto que estamos ocasionando en el planeta de manera individual. El estilo de vida Zero Waste invita a abandonar esa zona de confort, de vivir todo rápido y de no ser conscientes, y reconozco que esto puede traer muchas complicaciones en el proceso que pueden hacer que quieras abandonar todo antes de siquiera intentar.
"El objetivo no es encajar en el Zero Waste, es integrarlo a tu estilo de vida".
Déjame decirte que no existe un manual, sólo nos regimos por la regla de las cinco erres (que si no estas familiarizado con eso da click aquí para leer el post en el que hablo sobre esto), y estas reglas son tan flexibles como la goma.
Vivo en una familia grande y soy la única que promueve esta filosofía que podría considerarse más “extremista” (sólo por llevar mis contenedores a todos lados), pero cada uno hace lo que ha podido desde su trinchera aunque, claro está, mis influencias en ellos han hecho muchos cambios.
Nuestra forma de ser y la forma en que nos comprometemos con el mundo y con nosotros mismos son un gran ejemplo para quienes nos rodean y te aseguro que querrán integrarse.
Si queremos integrar a más personas, no humilles ni avergüences por que han cometido errores, nadie lo hace perfecto. Te aconsejo que los involucres de manera constante, que compartas infografías o páginas que informen con veracidad y, sobre todo, que compartas anécdotas de tus fallos para que crees empatía. De esta manera, la transición en las otras personas va a influir de una manera muy positiva y si le otorgas las herramientas podrá promover un estilo de vida más consciente de manera más rápida.
No podemos dar a nuestros conocidos algo que nosotros no tenemos y eso significa que hemos de trabajar el sentido de integración junto con ellos. Repito: la clave no está en encajar. El mayor error del Zero Waste es querer encajar en esta estética preciosa de artículos de bambú y acero inoxidable, con mil plantas hermosas por toda la casa, un montón de servilletas de tela en colores neutros, un huerto en casa envidiable y una composta perfecta. Eso sólo existe en Pinterest.
La integración del Zero Waste no nos exige que cambiemos nuestras metas o ideas, sino que seamos nosotros mismos con mayor conciencia y empatía medioambiental.
Los pondré en más contexto. Yo soy una chica de 21 años estudiando diseño gráfico, una carrera que necesita muchos materiales para aprender y crear diseños. En la medida de lo posible, llevo mi laptop a la universidad para tomar los apuntes de manera digital peeeero en diseño no somos de muchos apuntes, lo que me lleva a comprar muchos materiales de arte para completar mis tareas. Siempre analizo mis alternativas:
¿Me pidieron un material en especial?
Compro el empaque más grande, como las pinturas o el pegamento.
¿Me pidieron algún plumón especial?
Verifico si no existe una alternativa rellenable (más costosa, pero a largo plazo es una excelente inversión.
¿Me pidieron algún papel en especifico?
Al terminar de usarlo, guardo el papel y lo uso para probar materiales, para forrar cajas o lo que se me ocurra.
Tengo muchos consejos en mi post de regreso a clases sustentable, date una vuelta por allá para que te adentres más en el tema.
En mi casa me enfoco más en mis cosas personales como es mi rutina de skincare, mi ropa, etc. Y con mi familia en general lo que hago es separar la basura que puedo, en reciclables y en los compostables, y me encargo de llevarlo al centro de acopio y de poner los residuos orgánicos en la composta. Todos estos hábitos los fui adquiriendo aprueba y error, y para ahorrarte un poco esta exprimentacion (tampoco te puedo prometer que te voy a rescatar de todos los errores), he creado esta lista de los errores que creo serían los más comunes.
Comprar cosas innecesarias
Insisto, es precioooosa la estética zero waste: todo de bambú, cositas que se colapsan y se hacen pequeñitas, termos y recipientes de acero inoxidable, pero antes de que te adelantes déjame decirte que probablemente todo lo que “necesitas” tiene solución con lo que ya tienes en casa. Piensa que es lo que realmente necesitas. Por ejemplo, yo de golpe compré el famoso vasito colapsable peeeero no es la gran cosa, a mi no me funcionó tanto como me lo pintaron que lo haría. El vasito eventualmente se rompió, lo que me dejó un artículo que ahora no tengo ni idea de que hacerle.
No quieras adelantarte a comprar, esto nunca es la mejor opción.
Voltea tu casa y usa tu ingenio para ver que es lo que puede funcionarte. En mi casa teníamos muchos retazos de tela y con ellos hicimos muchas bolsitas para comprar a granel. Igual me pasó con los recipientes. De esta manera, te ahorras mucho dinero y consideras comprar únicamente lo que necesitas. Por ejemplo, yo llevaba un topper común a mi universidad para que me pusieran ahí la comida pero el trayecto a mi universidad queda muy retirado así que por practicidad adquirí el topper plegable que me ha venido de maravilla y le he sacado muchísimo provecho.
No te dejes llevar por lo biodegradable y por el greenwashing.
La mejor parte es que lo ecológico está de moda, pero esto ha hecho que las empresas quieran abusar del tema generando productos bañados en color verde con la frase “ecológica” o “compostable” pero un zero waster sabe que eso no es tan color verde como nos lo dicen. Sé un comprador consciente. Sé más estratégico: es más ecológico no adquirirlo.
No animarse a hacer los cambios
Es un error bastante común porque, como les comente al principio del blog, el zero waste nos puede sacar de nuestra zona de confort. La composta fue una de las cosas que me hicieron ponerme aprueba y ahora me arrepiento de no haberlo hecho antes: disminuyes muchísimo la basura y la tierra fértil que queda es un producto buenísimo para mis plantas. No te limites, ni de manera física ni mental, recuerda que el límite siempre lo pondrás tú.
Que la presión social no te minimice.
Comprendo al 100% esa sensación de vergüenza que puedes sentir al querer pedir tus cosas en topper o en tu propia bolsa. Al principio se me hacía un nudo en la garganta, y a veces hasta por pena prefería la bolsa y luego la metía en mi ecoladrillo. Manda muy lejos todo esto, de verdad, es TU vida, son TUS decisiones. Tu eres el consumidor, y créeme cuando te digo que, si eres muy especificx como si dices “es para no consumir plástico” entenderán de mejor manera tus intensiones. La vulnerabilidad es un verdadero compromiso, y te va a traer muchos beneficios.
Hacer todo casero
También fue un error en mi camino. Quería hacerme que el jabón de la ropa, de las manos, el shampoo sólido, la crema, incluso fui a un curso donde me dieron una lista de ingredientes IMPOSIBLES de conseguir en mi ciudad. A la fecha lo único que produzco son los jabones por que son muy sencillos de hacer y el resultado me gusta más que los que venden. No te agobies, algunas cosas sólo robarán tu tiempo y tu energía y te harán querer abandonarlo todo más pronto.
Si tienes más dudas o preguntas no dudes ni un segundo en contactarme. Estaré feliz de ayudarlos. Sígueme en mi instagram como @vidaresiduo_cero y compárteme tus comentarios e inquietudes. Estaré feliz de hablar contigo. Gracias por leer mi post.
Comentarios